lunes, 14 de agosto de 2017

Tú, sí, tú, eres un mal atlético (explicación razonada)

Basándome en las estadísticas, es de suponer que te gusta el fútbol. No te preocupes, no es grave. Bueno, en realidad sí que lo es: los casos más extremos embrutecen y aborregan a niveles vergonzosos. Pero la mayoría de la sociedad está, estamos, contagiados por el virus, así que comprendemos tus síntomas, a veces los compartimos, y no nos importa pasarlos por alto de vez en cuando. Si además de gustarte el fútbol eres una persona con algo de criterio y sensatez, tu equipo favorito será indudablemente el Atlético de Madrid. Vale, es una afirmación arbitraria que puede ofender a algunos, pero este blog es mío y me lo follo cuando quiero escribo lo que me apetece, así que jugando, ganando, peleas como el mejor, porque siempre tu afición se estremece con pasión cuando quedas entre todos campeón.

A los atléticos nos gusta decir que somos la mejor afición del mundo. Es un título honorífico surgido en torno a las campañas publicitarias de la señora Rushmore en aquella época, menos lejana de lo que nos gustaría, en la que en la hierba del Calderón pastaban Maniche, Costinha, Musampa, Pato Sosa, Luccin y mastuerzos de similar pelaje. Torres al margen, lo más parecido a un crack que teníamos era Ibagaza. El percal no daba ni para meternos en Europa League, con el ridículo añadido de que el vecino nos sobaba los morros cada vez que nos cruzábamos, y necesitábamos algo con lo que consolarnos. No resiste el menor análisis crítico, literalmente cualquier grada sudamericana o del este de Europa es más animosa, apasionada y fiel, pero oye, aquello cayó en gracia. Hicimos como que nos lo creímos para sacar algo de orgullo en esos tiempos sombríos, y ahora todavía seguimos con la cantinela.

Lo que pasa es que dentro de la mejor afición del mundo hay muchos, muchísimos, malos atléticos. Algunos no lo admitís por vergüenza, otros ni siquiera lo sabéis, pero lo sois. Gente contraproducente para el bien y el futuro del club y por tanto del equipo. Y cuesta identificarlos porque bastante gente no tiene claro cuál es el criterio correcto. Los hay que se creen mejores atléticos por llevar animando las rayas rojiblancas desde los tiempos de Adelardo, como si los adolescentes tuvieran culpa de haber nacido más tarde. Otros piensan que son superiores por no perderse un partido, como si los que viven lejos del estadio y no tienen tiempo o dinero para viajar fueran hinchas de segunda. Los hay que dan a entender su falsa superioridad porque compran todo el merchandising colchonero habido y por haber, menospreciando a los correligionarios que a lo mejor no gozan de tanta holgura económica o tienen otras prioridades vitales antes que la afición a un club deportivo. Los hay que identifican ser mejor atlético con apoyar de forma más incondicional, como si la pasión por un equipo nublara el sentido crítico e impidiera sentir filias y fobias por tal o cual jugador o entrenador.

Dibujo vilmente robado al maestro @jorgecrespocano


No, los malos atléticos sois otros. Los malos atléticos, a los que sin exagerar se os puede acusar de traidores, sois los que, desde dentro, contribuís a que la institución se hunda en la miseria. Sabes, seguro que lo sabes, tienes que saberlo, que los directivos actuales del Atleti (que son los mismos que ficharon a Musampa) son unos delincuentes juzgados y condenados por estafar al propio Atleti. Llevas años comprobando además que no hay una puta gestión que resuelvan bien y en la que no quede alguna trampa. Has visto, por ejemplo, cómo nos sancionan un año entero sin fichar por hacer trapicheos con niños (y no tengas los santos cojones de echarle la culpa del castigo al Real Madrid). Has visto cómo nuestros mejores jugadores tarde o temprano se largan. Viste cómo nos intervenía la Guardia Civil, cómo acabábamos en Segunda, cómo el "añito en el infierno" se convertía en dos temporadas en el pozo. Y mientras Giles y Cerezo perpetran todo eso, tú les ríes las gracias, igual que cantabas el "y tal y tal" en su momento. O casi peor, te resignas, te agarras a la prescipción de la condena (que significa que no se les puede encarcelar pero que el delito sigue existiendo), sueltas el típico "son unos sinvergüenzas pero no se puede hacer nada" y te dedicas a atacar e insultar a los que sí tienen el valor de hacer algo. Por eso eres un mal atlético.

Sabes de sobra que llevan años mintiendo pero te crees uno más de sus cuentos. Te han convencido de que necesitábamos un estadio nuevo a tomar por culo, en territorio enemigo, y además endeudándonos hasta las cejas. Aplaudes la Peineta porque va a tener wifi, una pantalla de LEDs y va a ser un poco más grande. Te atreves a decir que de verdad era preciso salir del Calderón, ese estadio que en los últimos 15 años no se han molestado en arreglar, porque "estaba anticuado". Piensas que la culpa de que no vaya a estar listo ni de coña para la fecha prevista es culpa del malvado y perverso Ayuntamiento que nos putea y que siempre favorece a los de blanco, y no de la inmensa y precipitadísima chapuza que es todo. Por eso eres un mal atlético.

Achacas a un complot vikingo-florentinista el hecho de que la FIFA y el TAS nos hayan multado a nosotros por fichar menores. Te da igual que ellos hayan solicitado la suspensión cautelar y nosotros no nos hayamos molestado en pedirla porque somos los más chulos del barrio. Crees que es culpa del Chelsea que Diego Costa no haya fichado todavía, después de dos años queriendo venderle y con el jugador, única petición expresa de Simeone, deseando volver. Dices que los ciervos son unos cabrones por "robarnos" a Theo, un jugador que se ha ido en un traspaso negociado, por menos dinero de la cláusula y encima pagando a plazos. Por eso eres un mal atlético.

Te parece bien que nos hayan cambiado el escudo y lo hayan sustituido por un logo. Te tragas el camelo de que el emblema que lleva representándonos a todos desde hace más de 70 años "necesitaba un rediseño"por "razones de marketing". Opinas que "la empresa" necesita "modernizarse" y que lo importante no es respetar nuestra historia, tradiciones y valores, sino que se vea bien en las redes sociales. Por eso eres un mal atlético. Un cliente cojonudo, pero un atlético de mierda.

No te das cuenta de que Simeone es un escudo humano que trajeron a mitad de temporada en 2011 cuando vieron que el globo se volvía a pinchar. No reconoces que todo, absolutamente todo, lo conseguido desde entonces hasta ahora es obra del Cholo y solo del Cholo. No quieres ver que en cuanto se le hinchen los huevos del todo, harto de que le desmantelen la plantilla, y se largue, vamos a volver a la mediocridad de la que veníamos porque a Gil y a Cerezo les da lo mismo que esto funcione o no. Acusas de la huída de Agüero, De Gea, Falcao, Arda, Diego Costa, Filipe y tantos otros a ellos mismos, que son, todos y cada uno, qué casualidad, unos "ratas". Te parece normal y aceptable que de la plantilla que ganó la Liga y llegó a la final de Champions en 2014, hace solo tres temporadas, solo queden seis jugadores (y porque uno se fue y volvió). Por eso eres un mal atlético.

Sostienes que para que Cerezo y los Gil se fueran tendría que venir "alguien que pague". Te la suda que ellos en su momento no hayan pagado nada y hayan cometido un fraude con tu club, como está más que acreditado, porque eso son "cosas del pasado" y "hay que mirar hacia adelante". No te importa que hayan utilizado al Atleti para promocionarse a sí mismos, como cuando Gil padre lo usó como trampolín para gobernar Marbella. Insistes en que como "el club es suyo" vale todo y pueden hacer lo que les salga de los huevos con tu pasión y tus sentimientos. Aplaudirías que viniera "algún multimillonario chino" a "invertir dinero" para que "el club crezca". Por eso eres un mal atlético, y de hecho, tienes una mentalidad mercantilista de búsqueda de la victoria a cualquier precio que pega más en otro barrio de la ciudad.

¿Que de dónde saco la autoridad para repartir carnés de atléticos buenos o malos? De la tranquilidad moral que me da saber que no apoyo a criminales. Si tú puedes decir lo mismo, enhorabuena, eres buen atlético. Si no, háztelo mirar y, por el bien del Atlético, refórmate o aléjate.

Edito: este artículo ha aparecido en el podcast "Atleeeti!", lo que me llena de orgullo y satisfacción. Aunque no pretendo matar ningún ciervo para celebrarlo.